La pequeña Clarisse apareció una fría tarde en un parque. Unos niños se la encontraron y, tras pedir puerta a puerta que alguien se la quedara, la llevaron a una comisaría. Peo cuando les dijeron que llamarían a la perrera, unánimemente dijeron que no, que allí no sobreviviría y se la llevaron de vuelta. Llegó la hora de irse a sus casas y no sabían qué hacer, incluso pensaron dejarla al lado del portal en una caja con agua y comida. Por suerte una persona pasó y cuando la vio se la llevó a casa.

Clarisse es una pequeña ronroneadora nata, algo miedosa aún, pero a la que le encanta estar en brazos.

Recién empieza a convivir con un perro a quien mira sin hostilidad y con una gata con la que las presentaciones van poco a poco pero son positivas.

Negativa a enfermedades felinas

Información básica
  • Sexo: Hembra
  • Edad: octubre 2019