Leo apareció hace un tiempo vagando por la calles de un pueblo de Sevilla, cruzaba la carretera, con el peligro que esto podía causar, desapareció por un tiempo largo.
En Marzo una familia nos pedía ayuda para un perro que habían quitado de las calles, le habían construido una chabola con cañas, plásticos… en el campo a las afueras del pueblo, amarrado con una cadena para que no cruzara las calles de nuevo. No le faltaba agua y comida, pero a causa de las lluvias su refugio estaba destrozado, no podía seguir allí, Arca lo recogió.
Leo es un perro grande, con fuerza, pero completamente dócil, se lleva bien con perros y parece que también con gatos y niños, le gusta estar con personas. Es un perro agradecido con sus cambios de vida.