Miki

Miki es nuestro abuelete, un perrito adorable que arrastra a sus espaldas una trágica historia, marcada por la pérdida de su anciana dueña y el abandono posterior durante semanas en la propiedad donde vivía sin apenas cuidados, alimento ni cariño.

Llegó a nosotros tras tener conocimiento de su caso, sin poder evitar hacernos cargo debido a su situación, que era insostenible.

Pasó días temblando en la jaula, sin moverse de las tablas, con la mirada pérdida, desorientado y sin saber que había hecho para que de pronto estuviera entre aquellas rejas y sin su dueña a la que guardó fidelidad hasta sus últimos días que le hizo compañía.

Gracias al esfuerzo y trabajo de los voluntarios, poco a poco Miki salió de aquel estado de shock en que se encontraba, comenzó dejándose acariciar la cabecita y en unos días ya estaba encima de nuestras piernas sin querer separarse de nosotros.

Es un viejito adorable, muy faldero, que le encanta dormir en el regazo, su mirada transmite alegría y vida, aquella que por unas semanas vió truncada.