Noi fue rescatada al cruzarse con una pareja en una carretera, no pudieron dejarla a su suerte, la recogieron y se puaieron en contacto con nosotros, no teníamos hueco para ella y la pareja decidió tenerla de acogida. Desde entonces, le han brindado mucho amor y compañía.
Noi, muy probablemente, ha sido una perrita abandonada desde bebé, ha tenido muy poco contacto humano y muchos miedos, pero es muy inteligente y se va adaptando muy rápido.
Al principio no sabía andar con arnés, hoy ya sube y baja escaleras, se acerca a las personas, juega con otros perros y hasta se anima a aprender trucos.
Es muy cariñosa, quiere estar siempre cerca.
Ahora Noi necesita encontrar una familia que la llene de amor para siempre y sea paciente con ella, ella estará dispuesta agradeciéndolo de la mejor manera, siendo la mejor compañera.